Con una vista excepcional del Lago San Pablo y el Imbabura, esta urbanización de lotes de una hectárea o más, es el objetivo de las familias que quieren pasar sus fines de semana en un lugar rodeado de belleza natural, cerca a todo pero lo suficientemente alejado, como para sentir la paz que brinda la naturaleza. Dentro de sus límites, cuenta con dos hoteles de primer orden. Este proyecto tiene lotes de venta.